Sección: Refrigeración

La refrigeración es necesaria para la vida cotidiana, dependemos de ella para la conserva de alimentos, y climatizar espacios, sin embargo algunos de los elementos del proceso resultan nocivos para nuestro planeta.

Clasificado por ASHRAE bajo la nomenclatura R-717, dentro del grupo de refrigerantes naturales, el amoníaco no destruye la capa de ozono y por sus propiedades tiene la ventaja de producir temperaturas de hasta -70°C.

El país como receptor de tecnologías en la refrigeración ha tomado una actitud tibia hacia la transición de fluidos refrigerantes prevaleciente en otros países. Tener conocimiento de la nueva era de refrigerantes y correlacionarla con problemáticas nacionales dan pauta para asumir nuevos retos, como en la capacitación de recursos humanos.

En el mundo existen gran cantidad de empresas, universidades e instituciones de investigación; dedicadas a buscar nuevos desarrollos en fluidos refrigerantes, aplicaciones, fuentes de energía, sistemas de control y en general ofrecer sistemas de producción de frío que consuman menos energía, más económicos y ambientalmente amigables.

Actualmente el desarrollo de una sociedad moderna exige una mejor aplicación de las bajas temperaturas para la conservación de productos perecederos a fin de satisfacer las necesidades alimentarias de una población en continuo crecimiento.

En los sistemas de refrigeración, como es bien sabido, cada uno de los componentes tiene un función específica y no menos importante es la participación de la tubería de cobre dentro de dichos sistemas, ya que por medio de las tuberías se conduce el refrigerante y el aceite necesarios para poder efectuar el enfriamiento, así como la lubricación de los componentes que lo requieren.