En junio el capítulo Ciudad de México de ASHRAE organizó la sesión técnica titulada “Retro comisionamiento,” la cual estuvo a cargo de Elsa Yáñez, presidenta del IMEIBOMA México, y de José Luis Frías, gobernador de ASHRAE Ciudad de México. Este último precisó que el retro comisionamiento es un “proceso formal, disciplinado, protocolario para diseñar, proyectar, construir, probar, capacitar y entregar un proyecto como se concibió”.
Frías agregó que para hablar de retro comisionamiento hay que saber el gasto a lo largo la vida útil de un edificio, así como el gasto total de energía consumida por los sistemas HVAC (12.6 por ciento); por tanto, cualquier medida que se tome para mejorar la eficiencia energética repercutirá no sólo en estos equipos, sino también en el consumo general de energía del inmueble.
El retro comisionamiento tiene un impacto de 2.4 por ciento en la reducción de energía en las ciudades, pero para obtener los beneficios es importante seguir los siguientes pasos a la hora de llevar a cabo este proceso: 1) reunión con el propietario-operador, 2) prueba y reporte de los equipos existentes, 3) desarrollar un plan personalizado viable, 4) calibraciones y reparaciones, 5) discutir planes a mediano y largo plazo, y 6) reporte de recomendaciones.
Por su parte, Elsa Yáñez presentó varios ejemplos de retro comisionamiento. Uno de ellos fue en un edificio LEED Plata, ubicado en Ciudad de México, el cual contaba con tres chillers enfriados por agua, un chiller de reserva, un sistema de bombeo variable, 17 UMAs y un Delta T de diseño de 14 °F. El retro comisionamiento consistió en cambiar las válvulas de balanceo manual por válvulas IoT, consiguiendo así ahorros en el consumo de agua, mejoras en la temperatura de retorno y la reducción de BTU por hora.